Cuando hablamos de Girona, lo primero que nos viene a la cabeza es la ciudad o sus zonas más turísticas, como su precioso litoral. Pero Girona no es solo la capital de la provincia, también es capital de comarca. Una comarca de interior, el Gironès, que tiene mucho para ofrecerte y que te está esperando para que lo descubras. Por eso hoy te traemos los mejores planes para hacer cerca de Girona y que no te puedes perder.
Sant Martí Vell
Este pueblo encantador se encuentra a apenas 30 minutos de distancia de Girona capital y a 30 minutos de la costa, y cuenta con poco más de 250 habitantes.
Uno de sus edificios más característicos es la Església de Sant Martí. Este templo románico, que fue reconstruido en el s. XVI, ya aparece referenciado en documentos del año 1035 junto con el castillo de la villa, hoy día desaparecido. La fachada del templo, fruto de su reconstrucción, es de estilo renacentista y su campanario, custodiado por gárgolas, es de estilo gótico.
Además, en la última restauración que se llevó a cabo en la iglesia se determinó que el lugar había sido habitado ya desde, como mínimo, el s. II a.C.
Nosotros encontramos la iglesia cerrada, pero se realizan visitas guiadas bajo solicitud (es posible que, debido a la situación sanitaria, estas visitas estén temporalmente suspendidas. Recomendamos llamar al Ayuntamiento y preguntar).
Lo que sí te podemos asegurar es que de Sant Martí Vell te vas a llevar un montón de fotos, porque en cada rincón tienes un escenario de leyenda.
Madremanya
A apenas 10 minutos de Sant Martí Vell se encuentra esta otra localidad de corte medieval que bien merece una visita.
Este precioso pueblo, que conserva su trazado y su encanto medieval, fue documentado por primera vez ya en el 994, y en intervenciones arqueológicas recientes se han encontrado cerámicas de época ibérica, lo que demuestra que el lugar estuvo habitado ya entre los siglos V y II a.C.
Uno de los atractivos de Madremanya es la Església de Sant Esteve, una joya de estilo románico tardío que fue construida alrededor del 1300.
Pero, sin duda, lo más bonito de este pueblo es dejarse llevar por el trazado laberíntico de sus calles y atravesar los gruesos arcos y muros de la antigua muralla que protegía la villa.
Cervià de Ter
También muy cerca de Girona se encuentra este pueblito en el que se han encontrado ruinas de época romana y que hacen suponer a los historiadores que en esta localidad pudo haber una estación de la Via Augusta, a medio camino entre Gerunda (Girona) y Iuncaria (Figueres).
Pero el primer documento en que aparece referenciado el castillo de Cervià data del año 992. El castillo se encuentra totalmente en ruinas esperando a ser recuperado, dominando la zona y ofreciendo unas vistas extraordinarias.
Los principales atractivos que se conservan en el municipio son el Monasterio de Santa Maria, fundado en 1053, y la torre del reloj que data del s. XVII.
Por cuestiones de tiempo, no pudimos acercarnos hasta Cervià de Ter, pero estaba en nuestro itinerario y, si volvemos por la zona, será una de nuestras paradas, seguro.
La Vall de Llémena
Esta zona privilegiada en la que parece haberse detenido el tiempo engloba la Mancomunidad de la Vall de Llémena. La Mancomunidad está formada por los ayuntamientos de Canet d’Adri, Sant Gregori, Sant Aniol de les Finestres y Sant Martí de Llémena; pueblos con más de un milenio de historia, que preservan buena parte de su fisonomía tradicional y que están rodeados por un entorno natural muy enriquecedor.
En la Vall de Llémena hicimos dos paradas:
– Sant Martí de Llémena
Fue una visita bastante rápida, porque se trata de un pueblo muy (muy) pequeño y porque fue nuestra última parada antes de emprender el camino de vuelta a casa. Es un lugar ideal en el que pararse a comer rodeados por la tranquilidad y el silencio. Un lugar con encanto.
– Canet d’Adri
No visitamos el pueblo como tal, sino que aparcamos en la Església de Sant Vicenç de Canet e iniciamos una ruta de senderismo sencillita que nos llevó hasta la Font de la Torre, en el torrente de Reixec. Allí pudimos ver las pozas (gorgues en catalán) y sus formas de origen volcánico, y recorrimos un tramo del camino adentrándonos en el bosque.
Nos encantan los saltos de agua y las pozas. Se nos ocurren pocos lugares más sugerentes para los sentidos, así que, siempre que tenemos ocasión, incluimos una de estas rutas en nuestro itinerario.
Esta ruta es circular, en total tiene 6,9 kilómetros, y es bastante sencilla. Para hacer la ruta completa hay que salir de la iglesia hacia la derecha (dejando la iglesia a la espalda), pero nosotros no teníamos tanto tiempo y tomamos el camino de la izquierda, que lleva directamente a las pozas de la Font de la Torre en apenas 10 minutos.
Importante: debido a la situación sanitaria, hay que reservar hora para visitar las pozas y evitar las aglomeraciones aquí.
Importante 2: está prohibido bañarse en las pozas bajo sanción de hasta 3000 €.
Girona
Estando por la zona, no podíamos dejar de visitar Girona capital, porque es una ciudad que nos encanta.
Como esta vez íbamos a pasar solo unas horas en la ciudad, organizamos nuestro tiempo con 3 actividades que te recomendamos:
– Baños árabes: documentados por primera vez en el año 1194, estos baños de estilo románico construidos a imagen de los baños árabes, han visto pasar entre sus muros la historia de la ciudad y han ido adaptando su función a las necesidades de su sociedad.
Son un remanso de paz en pleno centro de la ciudad al que ni siquiera Juego de Tronos se pudo resistir.
– Museu del Cinema: desconocido para muchos, este museo inaugurado en 1998, tiene su origen en la colección privada de objetos relacionados con el cine y la imagen de Tomás Mallol, y que actualmente pertenece al Ayuntamiento de Girona.
Su fachada y el hall ya prometen una gran experiencia en este museo interactivo, que pretende acercar a grandes y pequeños a los secretos de la magia del cine y de la imagen en movimiento.
Una visita muy interesante en la que Alma pudo toquetear y “dar vida” a imágenes estáticas.
– Visita guiada por el Barri Vell y las murallas: hicimos esta visita con Mireia, guía oficial de la Asociación de Guías de Girona, que nos llevó a descubrir la ciudad desde otra perspectiva y que nos contó todo tipo de curiosidades que solo sabe quien conoce bien la ciudad y su historia.
Nos contó también lo que supuso el rodaje de Juego de Tronos, que puso la ciudad patas arriba y que provocó un boom de curiosos y fanáticos que inundaron Girona durante meses. Y, la verdad, es que no nos sorprende que HBO eligiera Girona para rodar, porque es un escenario incomparable.
Fue un día agotador pero muy productivo.
Kayak del Ter
La mañana del sábado, nos arremangamos, nos calzamos nuestra ropa más deportiva, nos embadurnamos de protector solar y nos fuimos a remar (o a intentarlo) por el río Ter.
Pasamos unas horas fantásticas entre fauna y flora, rodeados por el manso Ter y en la compañía de Roger de Kayak del Ter, que nos tuvo una paciencia infinita y que nos explicó un montón de cosas interesantes sobre la vida del río y sobre su labor contribuyendo a la limpieza del cauce. ¡Ah… y vimos una tortuguita!
Fue una mañana redonda.
Dónde dormir
Quizá lo más fácil a la hora de buscar alojamiento en el Gironès es pensar en la capital, pero, en esta ocasión, nosotros os recomendamos que os quedéis en cualquier casa rural de la zona, porque se encuentran en un entorno privilegiado y cerca de todo.
En nuestro caso, nos quedamos en Can Bonet, en Sant Martí Vell, una masía catalana del s. XVII redistribuida en tres equipadísimos apartamentos independientes.
Nosotros nos quedamos en La Volta y nos sentimos como en casa, pero con la maravillosa sensación de estar rodeados de naturaleza y lejos del asfalto al que estamos acostumbrados.
Si estás buscando alojamiento por la zona, pásate por el post que le dedicamos a nuestra estancia en Can Bonet, y no te lo pienses mucho porque está muy solicitado.
Si como nosotros este año también vas a pasar tus vacaciones en España, échale un vistazo a todo lo que el Gironès y las cercanías de Girona tienen para ofrecerte.
Nosotros volveremos por la zona seguro, porque nos quedó pendiente ver el atardecer desde las ruinas del poblado íbero de Sant Julià de Ramis, y es una espinita que nos tenemos que quitar.
¿Conoces esta zona de la provincia de Girona o eres de los que siempre se quedan con su costa de ensueño? ¿Qué lugares conoces de los que te hemos hablado en este post? ¡Cuéntanos!
Compromiso de transparencia:
Este post es fruto de una colaboración con Gironès Turisme, pero todas nuestras opiniones y experiencias son reales, sinceras y no-condicionadas.
Este post contiene enlaces afiliados. + Info código ético
🔗 ARTÍCULOS RELACIONADOS SOBRE GIRONA